miércoles, 7 de junio de 2023

CENIZAS EN LOS LABIOS

 


CENIZAS EN LOS LABIOS

 

 

1

Basta con descorrer un poco la penumbra

que, intrusa, desespera este final del día,

para verte llegar igual que entonces

a la placita de Cisneros,

impasible en su luz, ensimismada,

como esculpida en un retablo de oro.

 

La tarde –fuego ya respirado por la sombra-,

solía demorarse en las campanas

remolona y astuta, y tú decías

desde el fondo indefenso de mis ojos:

   -No te vayas, amor, aún es temprano-.

 

En los muros llagados de la iglesia,

ocupando un retazo

de cal amarillenta,

quedaron nuestros nombres como pájaros

de pronto sorprendidos

por su propio fulgor y en él cegados.

 

Entonces eran frecuentes estos actos

-quizá lo son aún, no sé…-,

a los que reconforta

volver alguna vez llevando entre las manos

los restos del naufragio,

cuando apenas nos llega la noticia

de que seguimos vivos.

 

Angelina Gatell

8 de junio 1926

Barcelona (España)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

poesia