ESTA
PRUDENCIA
¿Dónde fueron los torrentes de tantos besos dados?
¿Dónde abandoné la sed por placeres extremos?
Invisible, un deseo fatal es inmoral.
Los sueños desconocidos nos impiden
acercar nuestros cuerpos por temor al abismo.
Esta prudencia en nada se parece al tenue
crecimiento de la primavera donde nos conocimos.
Elijamos antes de que nuestro amor desaparezca.
No me alcanza la razón para pensar
cómo gozan los cuerpos que no se acercan.
Tu presencia divide a mi ser en dos
y no me reconozco.
Derretida frente a otros cuerpos,
no soportaré esta imposibilidad,
este semblante de hombres muertos.
Lucía Serrano
Cuadro de Ramón Casas
No hay comentarios:
Publicar un comentario
poesia