RETORNOS DEL AMOR EN
LAS ARENAS
Esta mañana, amor, tenemos veinte años.
Van voluntariamente
lentas, entrelazándose
nuestras
sombras descalzas camino de los huertos
que enfrentan
los azules del mar con sus verdores.
Tú todavía
eres casi la aparecida,
la legada una
tarde sin luz entre dos luces,
cuando el
joven sin rumbo de la ciudad prolonga,
pensativo, a
sabiendas el regreso a su casa.
Tú todavía
eres aquella que a mi lado
vas buscando
el declive secreto de las dunas,
la ladera recóndita
de la arena, el oculto
cañaveral que pone
cortinas a los
ojos marineros del viento.
Allí estas, allí estoy contra ti,
comprobando
la alta
temperatura de las olas felices,
el corazón del
mar ciegamente ascendido,
muriéndose en
pedazos de dulce sal y espumas.
Todo nos mira
alegre, después, por las orillas.
Los castillos
caídos sus almenas levantan.
Las algas nos
ofrecen coronas y las velas,
tendido el
vuelo, quieren cantar sobre las torres.
Esta mañana, amor, tenemos veinte años.
Rafael Alberti
Del libro “Retornos de lo vivo lejano”
No hay comentarios:
Publicar un comentario
poesia